Han transcurrido ya tres meses desde que partimos de Gibraltar y en este periodo de tiempo han habido sus mas y sus menos con las distintas embarcaciones, si bien se han podido resolver casi todas las incidencias, salvo alguna que es irreversible. Durante este periodo de convivencia se ha podido evidenciar en mas de una ocasión la camaradería existente en el grupo y el espíritu de solaridad de todos para acudir en ayuda de quien la ha podido necesitar, bien sea para conseguir un material o una herramienta, salvar una embarcación que garrea o para sacarla de algún bajo o arrecife por una varada involuntaria, cosa que por cierto esta ocurriendo con demasiada frecuencia en los últimos días. Resumiendo, mas animados que nunca iniciamos la travesía a Bonaire con muchas ganas de reencontrarnos de nuevo y tomarnos un ponche de ron.
bionicun
VUELTA AL MUNDO EN VELERO 